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Alta Montaña, Sierra Nevada, del 5 al 8 de enero de 2023.

El pasado puente del Día de Reyes, del 5 al 8 de enero, varios miembros del Grupo Hinneni se dirigieron a la cordillera de Sierra Nevada, en la provincia de Granada, para comenzar el año con una ascensión invernal a la cima del pico Mulhacén (3479 m.s.n.m.).

Esta actividad, organizada por José Manuel Abellán alias “Pana”, sirvió como iniciación al montañismo para varios miembros del club, y a las travesías invernales mixtas por media montaña, en las que fue necesario utilizar material específico para terreno con nieve dura y hielo, como son crampones y piolet.

Jueves 5 | Jumilla – Trevélez

Los seis participantes de la actividad, José Manuel, Juan Pedro, Víctor, Nuria, Sandra y Víctor, salimos de Jumilla a las 16 horas en dirección a la primera parada del viaje, el pueblo de Trevélez, dónde haríamos noche para al día siguiente comenzar la ascensión a la cima del Mulhacén. Este pequeño pueblo situado en la parte septentrional de la Alpujarra Granadina es famoso por ser el pueblo situado a mayor altitud de la Península Ibérica (1476 m.s.n.m.), y un conocido punto de partida para numerosas rutas de ascensión a Sierra Nevada. A la llegada a Trevélez, y una vez instalados en un acogedor hostal, celebramos la Noche de Reyes como merecía, dando cuenta para la cena de dos roscones con chocolate.

Viernes 6 | Trevélez – Alto del Chorrillo – Mulhacén – Refugio de Poqueira | 17K 2000m+

A la mañana siguiente iniciamos la ruta a las 8:30 A.M. La ruta elegida parte de Trevélez y asciende por el valle que alberga el cauce del Río Chico hasta llegar al Alto del Chorrillo (2689 m.s.n.m.). El recorrido por este primer sendero resulta duro físicamente, por el elevado peso que cargamos en las mochilas y por las elevadas pendientes nada más comenzar, aunque resulta fácil de seguir gracias a la buena señalización. Según avanzamos vamos dejando atrás terreno de pastos para vacas y caballos, cortijos de piedra, y el pequeño pueblo de Trevélez, que resulta visible casi hasta la misma llegada al Alto del Chorrillo. Una vez allí, la ruta se cruza con la antigua pista que recorre la sierra desde Capileira hasta el pico Veleta. En este punto, donde se puede elegir entre bajar hasta el Refugio de Poqueira (2500 m.s.n.m.) situado en la ladera sur, o seguir ascendiendo, realizamos una parada técnica para comer e hidratarnos, antes de atacar la última parte de la ruta. Más adelante en el sendero se encuentra la división que lleva hacia la cumbre del Mulhacén o hacia la ruta de las Siete Lagunas. Continuamos ascendiendo con la vista puesta en el falso Mulhacén (Mulhacén II), dejando neveros aislados a nuestro paso hasta llegar a la base de su última loma, dónde se empieza a ver todo cubierto por nieve compacta. Es en este punto cuando nos colocamos los crampones y sacamos los piolets para poder seguir ascendiendo con seguridad. Cabe destacar de ese día las altas temperaturas, la ausencia total de viento y la poca nieve existente en la cara sur de la sierra, siendo predominantes los ventisqueros, que dan lugar a placas de nieve dura con zonas de hielo. Alcanzamos la cumbre del Mulhacén (3479 m.s.n.m.) alrededor de las 15:00 horas, dónde nos encontramos diversos grupos de montañeros. Tras celebrar a nuestra manera la proeza, y tras hidratarnos nuevamente, comenzamos el descenso siguiendo el mismo recorrido hasta poco antes del cruce del Alto del Chorrillo, donde cogemos un atajo que desciende por la ladera, cubierta piedra y borreguiles, hasta llegar al Refugio de Poqueira.

A la llegada al refugio nos encontramos con un lugar extremadamente acogedor y con un gran ambiente de montaña, aunque con un pequeño detalle, que puede parecer hecho a propósito para preparar a todo aquel incauto que no esté dispuesto a pasar frío, y es que no disponía de agua caliente, dando lugar a un “ratico malo” para los valientes que se atrevieron a darse una revitalizante ducha. Aquella noche disfrutamos de una rica y copiosa cena, seguida de un brindis con vino de Jumilla, cargado en las mochilas desde el principio de la ruta, y una ronda de juegos de mesa y cartas.

Sábado 7 | Refugio de Poqueira – Puntal de las Siete Lagunas | 14K 1300m+

A la mañana siguiente amaneció otro día soleado y sin apenas viento. Con el cansancio del día anterior a raya, y con el ya familiar dolor de hombros por cargar las pesadas mochilas, partimos en una nueva ruta, esta vez con objetivo de coronar la cima del pico Alcazaba (3365 m.s.n.m.).

En esta ocasión, somos cuatro los miembros del grupo que participamos en la ruta, que comienza desde el refugio de Poqueira y asciende por la ladera “atajo” hasta la loma del falso Mulhacén. Una vez allí, nos volvemos a colocar los crampones y avanzamos por el camino del Mulhacén, sin acercarnos a la cresta que lleva a la cumbre, en dirección a la Cuesta del Resuello. El avance por esta parte resulta delicado debido a la abundante presencia de placas de hielo camufladas entre nieve compacta, que obligan a extremar la precaución en cada paso. Una vez sobrepasada la Cuesta del Resuello, descendemos por un nevero muy pronunciado en pendiente hasta el valle de las Siete Lagunas, y lo atravesamos hasta llegar a la base del Puntal. Allí hacemos una parada técnica para retirar los crampones, pues apenas había nieve y eran muy aislados los neveros y ventisqueros en este pico, y comenzamos a ascender trepando por un terreno de pedrera y roca desnuda, hasta llegar a la parte alta del Puntal de las Siete Lagunas (3251 m.s.n.m.). Es en este punto donde, debido a la hora, decidimos no continuar hasta el pico Alcazaba, y regresamos de nuevo atravesando el valle.

Durante el ascenso de regreso a la Cuesta del Resuello ocurre un incidente que deja en evidencia la importancia de la preparación en este tipo de actividades, y es la rotura del crampón derecho de uno de los integrantes de la ruta. Se partió el extremo de la placa de metal que regula la separación entre la parte delantera y trasera del crampón, impidiendo que se quede sujeto en la bota y saliéndose de la misma. Esto podría haber supuesto un gran inconveniente de no ser por la preparación del organizador de la ruta, que llevaba en su mochila material diverso para reparaciones de emergencia, tal como bridas, alambre y cordino. Utilizando dos bridas, conseguimos sujetar la placa de metal a la puntera del crampón, permitiendo la progresión cuidadosa hasta el final del tramo con nieve y hielo. Una vez alcanzamos el collado del falso Mulhacén, descendemos por el mismo atajo del día anterior hasta el refugio.

En el refugio nos encontramos con los otros dos integrantes del viaje, Sandra y Víctor “Torcuato”, que habían realizado una ruta alternativa ascendiendo por el valle del Río Mulhacén hasta la zona de Lagunillas, caminando sobre el cauce del río helado, y siendo necesario el uso de crampones en gran parte de la ruta, para regresar posteriormente de nuevo al refugio por el mismo camino.

Domingo 8 | Refugio de Poqueira – Trevélez | 10K 300m+

El domingo nos despertamos con la sensación de que nuestra suerte había durado lo suficiente, pues el clima esa mañana era totalmente distinto al de los días anteriores, amaneciendo con el cielo nublado, con chubascos ligeros de agua-nieve y fuertes rachas de viento. Con este panorama, y más abrigados que ningún otro día, cargamos con las mochilas en dirección de nuevo a Trevélez, siguiendo el camino andado durante la ascensión del primer día. En el descenso tenemos la suerte de ver diversa fauna, como cabras montesas y varias aves rapaces.

Una vez en Trevélez, celebramos el éxito del viaje con un almuerzo típico del pueblo, unas buenas tostadas de pan con jamón ibérico que nos dejan con ganas de más y, con esas, partimos en los coches de regreso a Jumilla.

Fotos de esta actividad se pueden ver en la GALERÍA DE FOTOS.