El pasado fin de semana se ha realizado la salida prevista a Siles, ciudad de Jaén que tiene el encanto de su cercanía con la Sierra del Segura y con los Calares del Mundo y de la Sima. Salimos desde Jumilla el viernes por la tarde, día 8, a las cinco de la tarde 23 compañeros en 6 vehículos. Hacemos una parada en Riopar para tomar un café, llegando a Siles alrededor de las siete de la tarde. El hospedaje estaba previsto en el Hotel Cruz. Después del reparto de habitaciones y de instalarnos, se queda para la cena en el mismo hotel, que se fija para las 8,30 de la tarde. El hotel tiene una decoración muy de la sierra, con adornos de cornamentas de ciervos y otros motivos serranos. Una Chimenea, que está encendida para la cena con unos buenos troncos, colabora para que haya un ambiente totalmente atractivo, hasta el punto que decidimos tomar unas cervezas previas a la cena allí mismo, acompañadas de unos platos de frutos secos que pone nuestro compañero Vicente. Después de la cena algunos deciden dar un paseo antes de retirarnos a dormir, llegamos por la calle principal peatonal hasta un jardín donde una fuente da paso a una zona ajardinada. Nos retiramos pronto, el desayuno esta previsto en la mañana del sábado a las 8 de la mañana. Somos puntuales y poco después de las 8,30 de la mañana el sábado ya estamos listos para iniciar la actividad prevista para el sábado día nueve. Con los coches nos dirigimos hasta Arroyo Frio, donde hay una laguna artificial, que alimenta un manantial que brota del suelo entre las piedras. Desde que salimos de Siles ya se ha visto que había niebla, aparcados los coches en las cercanías del embalse, iniciamos la marcha con niebla, que conforme ganamos altura se va haciendo mas intensa. Nos dirigimos hacia el pico Calar del Mundo como primer objetivo, debemos superar unos mil metros de desnivel positivo hasta llegar a los 1.631 metros que tiene este pico. Hacemos una parada para almorzar y a pesar de la niebla llegamos al destino, después de las obligadas fotos en el vértice geodésico, iniciamos el descenso hacia la laguna de Bonache. Comprobamos que las dos depresiones de esa zona tienen agua, una de ellas esta llena de cañas. Allí paramos a comer. Reiniciamos la marcha en dirección a la «Plaza de Toros», curiosa construcción de piedra seca que se utilizaba para la reunión de las reses bravas y su carga a los camiones de transporte con una serie de pasillos y rampas de carga. Desde allí seguimos bajando en dirección a la laguna de Arroyo Frio, pasamos por una antigua casa en una llanura libre de vegetación, la Tinada del Ituero, que en su día tuvo mucha importancia, seguimos descendiendo hasta llegar a la laguna de agua cristalina y fría que algunas compañeras aprovechan para refrescar los pies. El recorrido total fue de unos 17 kilómetros. A las 18:30 estábamos de vuelta en Siles, nos cambiamos de ropa y salimos a dar una vuelta por la ciudad y tomar unas cervezas, nos dicen que se está celebrando una jornada Micológica y que en el mercado del pueblo se están exponiendo una buena variedad de setas, que varios expertos están clasificando, realmente es muy curioso ese mundo de las setas con una amplia variedad de especies, algunas muy peligrosas. También se aprovecha para hacer un recorrido nocturno por algunos edificios y plazas más significativos de Siles. Igual que el viernes la cena es las 20:30 en el Hotel, que por cierto nos ofrece variedad de platos todos muy apetecibles.
En la mañana del domingo desayunamos a las 8 y habíamos quedado que a las ocho y media o poco más deberíamos tener todo preparado para salir hacia Riopar, la actividad prevista para hoy es subir al Bosque de Robles desde la Fuente de las Arraigadas, este lugar nos pilla de paso. Después del desvío a Villaverde del Guadalimar, una camino a la derecha que llega hasta la Cañada de los Mojones nos deja al lado de la citada Fuente, desde donde se inicia la subida hasta la dolina llena de Robles de hoja caduca, conocida como bosque de Robles o Torca de los Melojos por los lugareños. Después de una fuerte subida el recorrido se hace por una sendero casi horizontal, entre una frondosa vegetación que hacen el paseo muy agradable. Paramos a almorzar en la zona más alta del recorrido, después rodeamos la dolina disfrutando de las vistas de los numerosos picos de la zona, Almenara, Almenarilla, Padrón , Padroncillo, etc. Regresamos a los coches y a la una de medio día ya estábamos en Riopar en el Bar San Juan tomando una cerveza y haciendo tiempo hasta las 2 de la tarde, hora que teníamos fijada para comer en el Bar de los Bronces.
Después de la comida, que fue del agrado general de todos los compañeros, iniciamos la vuelta a Jumilla sobre las 4 de la tarde. Un buen fin de semana sin incidencias disfrutando de unos parajes magníficos. Destacamos el trabajo de nuestro compañero José Ignacio que en las dos excursiones fue haciendo labores de limpieza de toda la basura que se iba encontrando, haciendo dos buenas bolsas. Una actitud magnífica de la que tomar ejemplo.
Fotos de esta actividad se pueden ver en la GALERÍA DE FOTOS EN TRES CARPETAS DISTINTAS.